Latón y Diseño de Ghidini 1961

Ghidini Bosco lleva más de 60 años creando objetos de latón a medida, en una fábrica donde cada etapa de la producción se desarrolla meticulosamente. En 2016, la empresa puso en marcha la nueva marca - Ghidini 1961 - que colabora con diseñadores internacionales para crear piezas innovadoras y atemporales en acero inoxidable y latón, cinceladas con todo el cuidado por cada detalle que es distintivo de la fina artesanía de Ghidini.

Con una capacidad de producción y unas técnicas de trabajo sin parangón, la empresa colabora con Lorenza Bozzoli y Stefano Giovannoni en la creación de impresionantes obras de arte, en las que el metal adquiere un poder casi escultórico en la definición de elegantes muebles contemporáneos y accesorios para el hogar finamente cincelados.

La estética marca de la casa Ghidini se caracteriza por un alma contemporánea y elegante. ¿Cómo surgió su colaboración con el diseñador Stefano Giovannoni y en qué valores se basa su estilo?

El estilo de nuestras colecciones está estrechamente ligado a nuestra experiencia en la industria metalúrgica, que es precisamente lo que nos permite experimentar con nuevas formas y nos anima a impulsar nuestra creatividad. Ninguna empresa del sector del mueble puede presumir de tener un bagaje de fabricación como el nuestro, por lo que los diseñadores que colaboran con nosotros pueden confiar en nuestros departamentos de fundición y mecánica para realizar productos de mobiliario con elementos de fundición que de otro modo serían imposibles de fabricar. En cuanto a la calidad expresiva de nuestros productos, es más bien un maridaje entre la visión del diseñador y la dirección creativa interna de la empresa. Estamos orgullosos de nuestro equipo de diseño, formado por personas notables que han marcado la historia del diseño internacional.

El trabajo del metal es un arte extremadamente complejo. En sus obras, la búsqueda de nuevas tecnologías convive con el uso de técnicas tradicionales. ¿Cuál cree que es la característica más interesante de este material y por qué?

Si echamos un vistazo al sector del mueble "Made in Italy", nos damos cuenta de que siempre ha estado asociado a la madera. Hacer arte y muebles utilizando aleaciones finas como el latón, el bronce y el aluminio es, en sí mismo, una novedad, una característica distintiva. Vivimos en un mundo en el que la búsqueda de la distinción, de huir del conformismo, es cada vez más importante; por eso se nos aprecia, porque se nos percibe como promotores de un lenguaje artístico nuevo, más contemporáneo. Además, los elementos metálicos confieren a nuestros productos un atractivo de alta gama, coherente con nuestro posicionamiento.

A través de colaboraciones con diseñadores nacionales e internacionales, han conseguido definir una identidad moderna pero acorde con los valores históricos de la empresa. ¿Cómo surgió la colaboración con Lorenza Bozzoli?

Lorenza es una de nuestras diseñadoras más importantes, a la que admiramos enormemente. Llevamos varios años colaborando con ella, y todo empezó por sugerencia de Stefano Giovannoni, que entonces era nuestro director creativo. Más allá de su innegable talento, apreciamos especialmente la sensibilidad de Lorenza hacia las necesidades del mercado, que consigue interpretar utilizando un lenguaje nuevo y expresivo, diferente de las tendencias dominantes.

Lleva más de 60 años defendiendo los valores tradicionales del "Made in Italy" y de la artesanía local, primero con Ghidini Bosco y ahora con Ghidini 1961. ¿Ha cambiado con los años la forma de expresar estos valores? ¿Cuál cree que será la evolución de la artesanía italiana?

Nuestra empresa siempre ha estado profundamente arraigada en nuestros orígenes geográficos. Tenemos generaciones enteras de familias que han trabajado y siguen trabajando con nosotros; esto ayuda a establecer una relación especial que va más allá del trabajo en sí. Para nosotros, esto es crucial para preservar el "saber hacer" de nuestro departamento, que es uno de los rasgos distintivos tanto de Ghidini1961 como de Ghidini Bosco. En realidad, el valor de lo hecho a mano y del verdadero "Made in Italy" nunca ha cambiado para nosotros, sino todo lo contrario. Hoy vivimos en un mundo globalizado, en el que se puede producir cualquier cosa en cualquier lugar, y la búsqueda de la calidad y la distinción -algo que los italianos sabemos transmitir muy bien- es cada vez mayor. Creemos que la artesanía italiana tendrá un futuro brillante siempre y cuando esté alineada con una aguda conciencia de las necesidades del mercado actual, tanto desde el punto de vista comercial como de la comunicación. Por tanto, es esencial estar siempre al día tecnológicamente, ofrecer un excelente servicio postventa y contar con una amplia red de distribución que proporcione un importante apoyo local.