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Castello di Vicarello: un castillo de ensueño en Toscana

Un castillo medieval de ensueño, una lujosa combinación de historia y encanto, el lugar perfecto para disfrutar del estilo de vida italiano rodeado de las verdes colinas toscanas y los paisajes únicos que distinguen a la región de la Toscana.

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Un lujoso castillo tradicional de piedra situado a las afueras del pueblo medieval de Poggi del Sasso, entre la hermosa ciudad de Siena, conocida por muchos por el famoso Palio di Siena, una competición medieval que tiene lugar dos veces al año, y el pueblo costero de Castiglione della Peschaia, conocido por su impresionante castillo con vistas al mar.

Castello di Vicarello, es un refugio único por muchas razones, una de ellas es que goza de una vista de 360 grados sobre las ondulantes colinas toscanas cubiertas de olivos centenarios y viñedos. La larga historia del castillo está guardada en la misteriosa arquitectura de reminiscencias renacentistas, que ha sido restaurada y devuelta a su antiguo esplendor gracias a los propietarios Carlo y Aurora Baccheschi Berti.

Los interiores, elegantemente decorados, presentan suelos de piedra y paredes de ladrillo originales. Una exquisita combinación de muebles antiguos y modernos procedentes de Europa y del Lejano Oriente aluden a los muchos años que Carlo y Aurora vivieron en Indonesia. Cuatro de las siete habitaciones y suites disponibles giran en torno al antiguo patio pavimentado con losas del castillo, mientras que las tres suites independientes restantes están situadas en medio de verdes jardines, rosas blancas, lavanda y olivos centenarios.

No lejos del castillo había una antigua iglesia parroquial, ahora desconsagrada y utilizada como residencia privada, que sólo se reconoce por el campanario.

La Toscana es famosa por su cocina auténtica y fresca, y la cocina del Castello di Vicarello supera incluso las expectativas; ofrece a sus huéspedes fruta y verdura de cultivo ecológico, vino y aceite de oliva caseros y un menú que cambia a diario, servido en un romántico patio en verano o junto a la chimenea en invierno.

Para los amantes del relax, dos piscinas infinitas y un spa rodeado por las colinas toscanas cumplen los requisitos, mientras que para los aventureros, el castillo está rodeado de carreteras panorámicas ideales para montar en bicicleta o a caballo.